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Gastón Matínez Aleaga
Creado hace 145 años en Bayamo, el Himno Nacional de Cuba se
distingue por el enorme significado patriótico y su belleza formal,
afirmó el reconocido músico Carlos Puig Premión,en la ciudad de Bayamo,capital de la provincia cubana de Granma.
Repleta de lirismo y belleza, destacó, “La Bayamesa” resultó un gran
símbolo de amor a la Patria, e inspiró a los cubanos en los grandes
momentos de la historia.
Director de la Banda Municipal de Conciertos y ganador del último
concurso nacional de composición Alejandro García Caturla, Puig Premión
recordó que el prócer independentista Pedro (Perucho) Figueredo
(1819-1870) escribió la pieza en la madrugada del 14 de agosto de 1867.
En palabras a la AIN, el compositor y arreglista comentó que Perucho
llamó La Bayamesa a la obra, y en horas de la noche de aquel día la
presentó ante el Comité Revolucionario de Bayamo, integrado en dicha
fecha, para organizar la primera contienda anticolonial en el país.
Precisó que Figueredo incluyó dos compases de la canción “La
Marsellesa” (devenida símbolo patrótico de Francia), sin apartarse en
ningún momento del himno como género musical ni de la más genuina
cubanía.
Puig Premión señaló cómo, en medio de la conspiración anticolonial,
el músico Manuel Muñoz instrumentó la obra y el 11 de junio de 1868 la
interpretó en público, con su orquesta, ante las autoridades españolas
de la ciudad.
El 20 de octubre de ese mismo año, dijo, el pueblo de aquí cantaría
por vez primera la letra del futuro Himno Nacional, y el ocho de
noviembre siguiente se efectuaría el estreno oficial, a cargo de la
banda de Muñoz y un coro de seis jóvenes negras e igual cantidad de
blancas.
“La Bayamesa” de Figueredo fue reconocida como himno de los patriotas
cubanos en todas las asambleas constituyentes del país, empezando por
las realizadas en las guerras contra el dominio colonial de España.
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