Por Raciel Pérez MartínezEn un ambiente signado por la destrucción, el hambre la miseria y la muerte, Haití realizó elecciones presidenciales este domingo, matizadas por las denuncias de masivos fraudes.
Fue tan grande el ambiente de inseguridad y de no garantía de un proceso de conteo justo, que la mayoría de candidatos a la primera magistratura pidieron de manera colectiva que se anularan las elecciones, aunque el Tribunal Electoral descartó esa posibilidad.
Unas cuatro millones 700 mil personas estaban convocadas a las urnas, aunque el resultado mostró un elevado abstencionismo, debido a la situación desesperante que vive la población del país más pobre del continente.
Masivas irregularidades irritaron y desorientaron al electorado, muchos de los cuales acudieron a los lugares de votación sólo para comprobar que sus nombres no aparecían en los registros. Otros votaron varias veces.
La destrucción de algunos edificios fiscales a raíz del terremoto que azotó Haití, el pasado enero, puede ser la justificación de alteración y ausencia de listados.
También atentó contra el normal desarrollo de las elecciones haitianas la jornada anterior el temor a contraer el cólera, que ya ha cobrado más de mil 600 muertos en las últimas semanas.
Debido a que el conteo de votos es manual, los resultados oficiales serán publicados el 20 de diciembre, cuando se conocerá si es necesaria o no una segunda ronda electoral, prevista para el próximo16 de enero.
Estas elecciones en Haití definen el sucesor del presidente René Preval, así como 11 miembros del Senado y 99 diputados.
Los sondeos favorecen a la aspirante opositora Mirlande Manigat, ex primera dama de 70 años, que podría convertirse en la primera mujer en dirigir los destinos de la nación.
El nuevo jefe de Estado heredará un país devastado por el terremoto del 12 de enero pasado que ocasionó más de 250 mil muertos, tres millones de damnificados y un millón y medio de personas sin hogar.
Emprender la reconstrucción y reubicar a las familias asentadas en campamentos será su más difícil tarea, sobre todo si se tiene en cuenta que de la ayuda prometida por la comunidad internacional apenas ha llegado el 10 por ciento.
Poco se habla de que Haití está militarmente tomado por tropas, bajo el amparo de Naciones Unidas.
Mientras la situación en nuestra vecina República de Haití es extremadamente compleja, sin una salida clara a su problemática, en Cancún, México comienza hoy lunes la Cumbre sobre Cambio Climático.
Más de 190 países harán todo lo posible para que el espectáculo montado por las naciones ricas en Copenhague, Dinamarca, no se repita esta vez.
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