Por Raciel Pérez Martínez
Foto PL
Los sirios de una manera contundente desmintieron a los grandes medios de prensa internacionales, cuando millones de personas salieron a las calles este jueves, para brindarle el apoyo al gobierno de del presidente Bashar al-Assad, al cumplirse un año del inicio de la violencia armada y terrorista.
La machacona frase de que el pueblo sirio se levanta en masa contra la actual administración de su país quedó desnuda de argumentos, porque la mayoría de la población respalda a Bashar al Assad, y aprueba sus reformas.
Por todo el país se sumó una gran multitud a la denominada Marcha por la Paz, convocada por organizaciones juveniles, estudiantiles, sociales y políticas, sirios de diversas edades, diferentes creencias religiosas y disímiles criterios.
Ahlam, una joven profesora que manifestó sentirse orgullosa de ser siria, dijo a Prensa Latina que "ya el país ha sufrido demasiado; por un lado, las sanciones económicas y las campañas política y de los medios y, por el otro, la violencia terrorista de los grupos armados han hecho que nos veamos afectados todos".
Con una gorra y un abrigo con los colores de la bandera siria,
mientras caminaba hacia la plaza Omeya, en Damasco, escenario de la concentración, la educadora agregó que si bien existieron problemas con el gobierno, este comenzó a rectificarlos y respondió a las aspiraciones de la gente al lanzar el proyecto de reformas.
La profesora Ahlam censuró fuertemente a quienes desde el exterior quieren de forma oportunista aprovecharse de la crisis, y dice no reconocer al llamado Consejo de Estambul... "Esos ni saben ellos mismos quiénes son", dijo .
También Ahlam repudió a Catar y a Arabia Saudita "porque siendo
árabes nos han atacado, dando dinero y armas para desatar la violencia y han fomentado la sectarismo religioso".
Muchos sirios también se quejaron, de que las cadenas de televisión extranjeras, no reportan los multitudinarios actos de apoyo al presidente Bashar al-Assad.
En Siria hasta hace muy poco tiempo se vivía en paz, en armonía; nadie preguntaba a otro si era sunita, shiita , cristiano o alauita, pero desde que comenzó la intromisión extranjera se ha querido introducir el divisionismo.
A un año del comienzo de los actos terroristas contra el gobierno,
financiados desde el exterior, se celebra en toda Siria la expulsión
de las bandas armadas de las ciudades de Homs y de Idleb.
El guión libio de las potencias occidentales no está funcionando en Siria.
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