CONSEJO DE SEGURIDAD DE LA ONU ATIZA LA GUERRA EN LIBIA

Por Raciel Pérez Martínez


Ante la inminente derrota de los rebeldes en Libia, el Consejo de Seguridad de la Organización de Naciones Unidas se apresuró a declarar este jueves una zona de exclusión aérea en ese país árabe del norte de África.

El principal bastión de los sublevados contra el gobierno de Muammar Al Gaddafi, la ciudad de Bengasi, está rodeada por el ejército leal al presidente, y anunció que este viernes desalojaría a las bandas que allí operan.

Gaddafi en un discurso televisivo a toda la nación dijo que los días negros en la historia de Libia estaban finalizando, y todos celebrarán la gran victoria contra los que llamó “infieles”.

Cuando esa guerra civil parecía que llegaba a su fin, el Consejo de Seguridad de la ONU echó gran cantidad de combustible al conflicto al adoptar una posición injerencista en los asuntos internos de Libia.

En el Consejo de Seguridad diez países dieron luz verde a la intervención de la Organización del Tratado del Atlántico Norte en la guerra civil libia, ninguno en contra y cinco abstenciones, entre ellas Rusia y China, de la que se esperaba el veto, así como Alemania que valientemente pudo despegarse de su posición tradicional.

Este acuerdo de la tiranía mundial, como se le llama a este exclusivo club de cinco países que deciden lo que no pueden hacer otras 195 naciones, va más allá de la exclusión aérea, también la posibilidad de tomar todas las medidas necesarias.

Recordemos que el Consejo de Seguridad de la ONU tiene como países permanentes con derecho a veto, a Estados Unidos, Reino Unido, Francia, Rusia y China, más otros diez con menor poder que de manera rotativa pasan por el organismo.

Generalmente Rusia y China mantienen una posición contributiva a favor de la paz, este no es el caso, pero llama la atención la postura alemana, que se abstuvo, explicando su embajador que habrá más pérdida de vidas humanas, y el riesgo de entrar en un dilatado conflicto militar por lo que su país no contribuirá con esa iniciativa bélica.

Si interviene la OTAN en Libia, como ya es inminente, el presidente Gaddafi hará extender la guerra al mediterráneo con bombardeos de su artillería a cuanto barco pase frente a sus costas, lo que crearía un caos en la región.

Las grandes trasnacionales del arma están de pláceme por la decisión de la ONU contra Libia, porque así aumentarán las compras y con ellas la codiciada ganancia.

El pueblo libio ha reiterado que no quiere intervención extranjera en su país, porque sobran ejemplos negativos cercanos a su patria como lo son Irak y Afganistán.

La Organización de Naciones Unidas, creada con el propósito de mediar en los conflictos y propiciar la paz, nuevamente se equivocó este jueves, al atizar la guerra en Libia.