Jack Horner, paleontólogo y consultor en las películas 'Parque Jurásico', da su opinión del tema.
En el libro
Parque Jurásico (Michael Crichton, 1990), el cual Steven Spielberg
adaptó en una película, los científicos de la compañía InGen logran
revivir a los dinosaurios usando ADN extraído de insectos prehistóricos
atrapados en ámbar, una resina de los árboles.
¿Será esto posible? Con la tecnología de
hoy, no. El ADN se degrada un 50% cada 500 años en huesos fosilizados.
Esto hace improbable que se pueda obtener algo útil.
Sacarlo de la sangre de un insecto tampoco es viable, ya que se tendría que separar el ADN del mosquito del dinosaurio.
Sin embargo Jack Horner, paleontólogo
que sirvió como consultor en las cuatro películas de Parque Jurásico,
propone otra forma para revivir a los dinosaurios. No buscar en el
pasado sino en el presente.
Partiendo de la premisa que las aves son
los descendientes directos de estos gigantes prehistóricos, propone la
técnica de activación genética de características atávicas, es decir,
estimular los genes ocultos en las aves para sacar a la luz esas
características que perdieron durante su evolución.
Primer paso
Pero este método no está tan alejado de
la realidad. Recientemente, un grupo de investigadores de la Universidad
de Chile alteraron la forma de las patas de un embrión de pollo para
que se asemejaran a las de los dinosaurios, con el objetivo de entender
mejor el proceso evolutivo.
La mayoría de las aves modernas tienen
un dedo del pie opuesto que les sirve para aferrarse a las ramas o para
atrapar a sus presas en pleno vuelo. Pero en el caso de los dinosaurios
terópodos, como el Tiranosaurio Rex, este dedo no es oponible y es
demasiado pequeño para tocar el suelo.
Los investigadores descubrieron que este
dedo se vuelve opuesto en las aves producto del movimiento del embrión
dentro del huevo. Por lo tanto, se inyectó una droga para evitar esa
acción. Creando de este modo, pollos con patas como las de los
dinosaurios.
Expertos de las universidades de Yale y Harvard realizaron un proyecto parecido.
El experimento consistía en desactivar
genes del rostro del embrión de un pollo, con el objetivo de trazar las
bases en el proceso de transición del hocico de dinosaurio hasta el pico
de una ave.
El resultado fue embriones con un cráneo y hocico parecido al de los dinosaurios terópodos.
EL COMERCIO (PERÚ)
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